Aunque en los últimos cinco años no se ha registrado ningún deceso, un total de 40 personas han resultado heridas, por lo que las autoridades municipales confirmaron en días pasados que se instalarían retenes en las entradas del municipio para evitar el ingreso de armas o pólvora no autorizada para este festejo, el cual comprende del 18 al 22 de febrero.
En este sentido, majestuosos trajes, gafas de sol sobre las máscaras, grandes barbas, vistieron las vialidades de esta localidad, donde también se conmemora el primer casamiento indígena, la fundación del convento franciscano, el paso del emperador mexicano Agustín de Iturbide y la batalla entre franceses y mexicanos.
El primer, segundo, tercero y cuarto barrio son dirigidos cada uno por un general en jefe, quien permanece al frente para controlar la fluidez del carnaval, posteriormente pasan personas caracterizadas de negritos, apaches, indígenas, zapadores, zacapoaxtlas y turcos.